14 de abril de 2004

El día 14 de abril partimos de Ghunsa temprano con el objetivo de alcanzar el pequeño poblado de Kambachen.  La primera parte de la marcha transcurre por un sendero entre alerces, abedules y sabinas sin excesiva pendiente y atravesando torrentes afluentes del Ghunsa Khola.  Este tramo poco pendiente nos lleva unas dos horas y media hasta llegar a Rampuk Kharka a 3720 m.  Desde este punto, el camino se hace mucho más estrecho y escarpado atravesando zonas de desprendimientos que obligan a caminar con atención.  Algo más arriba, el sendero se torna más tranquilo y comenzamos a ver el valle norte del Jannu cuyo fondo está ocupado por un enorme glaciar.  También podemos ver la impresionante cara norte del Jannu, pico de 7710 m, que en estos momentos está siendo escalada por un potente equipo de escaladores rusos.

Sin duda estamos ante uno de los paisajes más sobrecogedores de todo el Himalaya como lo atestiguan los relatos o narraciones de los principales viajeros de esta cordillera. El tiempo sique siendo inestable con mucha nubosidad a partir de media mañana, pero sin importantes precipitaciones.  Hacia mediodía llegamos a Kambachen tras algo más de cinco horas de marcha.

Esta pequeña aldea de yakeros está situada a casi 4100 m de altitud y solo permanece habitada en la primavera y en el otoño, mientras que durante el verano monzónico y el invierno, sus actuales pobladores permanecen en los pueblos bajos del valle.

En este lugar decidimos permanecer dos días para conseguir mejor aclimatación.

En la jornada siguiente, algunos de los miembros de la expedición hacen una salida de aclimatación por las montañas que dominan el poblado hasta una altitud de 4500 m.  Por la tarde, comienza a nevar, empeorando el tiempo hasta la madrugada del día 16 en la que todo el paisaje aparece blanco con 10 cm de nieve pero con un amanecer radiante que realza, incluso, el grandioso paisaje que nos rodea.

Este día 16, salimos hacia Lhonak, siguiente etapa en nuestra marcha de aproximación.  El tiempo es perfecto y tardamos 4 horas y media en alcanzar este gran llano, a pesar de que para algunos de nosotros notamos la altitud, teniendo que caminar con lentitud y haciendo numerosas paradas.

El emplazamiento del campamento en Lhonak está sobre una gran planicie originada por el embalsamiento de las aguas de un río de origen glaciar y las morrenas del gran glaciar del Kachenjunga.  Estamos a 4700 m de altitud y cuando llegamos a este lugar, el día es espléndido, sin embargo, como casi todos los días, las nubes ascienden valle arriba y pronto el ambiente se vuelve neblinoso y frío.

De nuevo decidimos permanecer dos días en este lugar, pues estamos seguros de que va a ser muy positivo para nuestra aclimatación y decidimos que en la siguiente jornada (día 17) haremos alguna ascención para dormir de nuevo en Lhonak.  Sin embargo, el amanecer nos muestra un cielo amenazador que coincide con las previsiones meteorológicas que habíamos recibido por correo electrónico, por lo que cambiamos de planes y decidimos hacer una jornada de reposo por los alrededores del campamento.

Sin embargo, la mañana mejora y dos de los miembros del grupo deciden ascender por las laderas del pico de Lhonak de 5500 m, con pocas esperanzas de llegar arriba debido al tiempo inestable.  Sin embargo, entre nubes y fuerte viento alcanzan dicho pico llegando de vuelta al campamento entre los primeros copos de lo que sería una copiosa nevada que duraría toda la noche y que cubre la montaña con casi 15 cm de nieve.

El día siguiente parece cumplir la norma de toda la marcha y amanece un día radiante con las montañas absolutamente blancas.  Hoy nos toca la marcha hasta Pangpema, lugar en el que finalmente vamos a instalar nuestro campamento base y que se halla a casi 5100 m de altitud.  El recorrido se desarrolla por la morrena lateral derecha del glaciar del Kanchenjunga, tercera montaña más alta de la tierra con 8598 m que divisamos según ascendemos y que domina majestuosa todo este macizo del Himalaya.  Tras caminar 4 horas, accedemos a las planicies en las que vamos a permanecer durante el próximo mes y donde nuestros tres sherpas han montado ya las tiendas del campamento.  Este se asienta sobre unas praderas entre la morrena y las laderas de las montañas de cinco y seis mil metros que nos dominan por el norte.  Las vistas de la vertiente septentrional del Kanchenjunga y de su vecino Yalung Kang (8505 m) son magníficas.

Debido a la buena aclimatación realizada, todos nos encontramos en un estado razonablemente bueno teniendo en cuenta la altitud del campamento.  Nuestros sherpas, oficial de enlace y staff de cocina (que nos han premiado con una suculenta cena de inauguración de campo base) funcionan magníficamente y tenemos con ellos una estupenda relación.  Hoy, día 19, nuestros sherpas han ido a marcar la ruta por el glaciar rocoso por el que discurre la ruta hacia nuestro futuro campamento I.  El terreno es fácil pero complejo, siendo necesario marcar bien la ruta para las sucesivas subidas y bajadas.  Calculamos que el campamento I estará a tan sólo 5300 ó 5400 m,  pero a mucha distancia del base, por lo que tendremos que montar un segundo campamento cerca o en el collado del Jonsang La, ya a más de 6000 m de altitud.

Hoy también hemos acabado de organizar el campamento base y puesto en funcionamiento todas las comunicaciones.  Nada más por el momento.

Un cordial abrazo de todos.

Expedición Sociedad Geográfica al Dome Kang