22 de abril de 2004

Hoy día 22 bajo una copiosa nevada os mandamos una nueva crónica con cierta tristeza por haber despedido a las tres amigas, Sara, Pilar y Patricia que nos han acompañado hasta este día. Mañana tenemos pensado ir todos hacia el campo I, situado a 5300 metros en medio del glaciar de Jonsang, para en la jornada siguiente continuar hasta localizar el mejor emplazamiento del Campamento II. Sin embargo las últimas previsiones meteorológicas nos hacen dudar de si aplazar la ascensión en una o dos jornadas.

Desde que llegamos al Campo Base de Pangpema todo se ha desarrollado perfectamente. Tras organizar las tiendas y el equipo como relatábamos en la crónica anterior, fueron en la jornada del día 20 Carlos, Mari Angeles, Salvador y Pedro hasta el Campamento I, para transportar equipo y aclimatarnos.

Nos acompañaron nuestros sherpas que se volvieron con Salvador quedando en el Campamento los tres miembros restantes. El recorrido resultó largo y algo complicado dado el terreno por el que discurre, inclinadas morrenas laterales, grandes campos de bloques y un glaciar revestido de rocas que obliga a un continuo sube y baja. Además es difícil de reconocer el itinerario, que hemos marcado con numerosas banderas de bambú e hitos de piedras. El campamento está formado por tres tiendas situadas en un depresión del glaciar, muy bien protegido y muy seguro. La marcha fue bastante dura por el peso de las mochilas y el tipo de terreno, pero al magnífico día se unía uno de los paisajes más impresionantes del Himalaya con el Kanchenjunga, Yalung Khang y Nepal Peak presidiendo nuestra andadura.

Carlos y Pedro siguieron más allá del Campamento para reconocer la ruta, que se mantiene con las mismas características, logrando avistar en la lejanía nuestro anhelado collado del Jonsang La, donde pretendemos instalar el Campamento II.

El día 21 nuestra doctora, Mari Angeles, Pedro y Carlos madrugaron y llegaron en las primeras horas de la mañana al Campamento Base e inmediatamente se inició una de las ceremonias clásicas de toda expedición al Himalaya del Nepal. Se trata de la “Puya “, en la cual un lama, en este caso el del poblado de Kambachen, invoca mediante sus rezos a los espíritus de las montañas para lograr la seguridad y el éxito de todos los miembros de la expedición. Para ello quema ramas de enebros y ofrece alimentos a los dioses. A la ceremonia se unieron los seis miembros, recién llegados, de una expedición austriaca cuyo objetivo es escalar el Kanchenjunga.

Como decíamos al principio ahora estamos a la espera de noticias sobre el tiempo para tomar las decisiones sobre el inmediato futuro, pero el ánimo y el estado físico de todos los miembros es excelente lo que unido al mucho tiempo disponible nos hace ser optimistas.

Un fuerte abrazo de todos.

Expedición Sociedad Geográfica Española al Dome Khang