13 de noviembre de 2011

“Estábamos decididos a salir a la primera oportunidad que se presentara, y esta noche el viento ha dejado de soplar. A las 06.00 horas hemos empezado a desenterrar las pulkas y a prepararnos, nos ha costado lo suyo! Hemos iniciado la marcha muy animados y después del primer kilómetro el viento ha vuelto a subir, esto sumado a la nieve virgen que nos dificultaba el paso y la poca visibilidad han convertido este día en un nuevo pequeño infierno, para recorrer 10 metros hemos necesitado en algún tramo 15 minutos.

Nuestro objetivo era un collado donde aparentemente el viento no soplaría tan fuerte, pero la ruta era cuesta arriba y dividida por un glaciar, o sea que hemos decidido rodearlo, en el GPS aparecían varias grietas pero la poca visibilidad impedía ver nada y finalmente hemos decidido acampar y esperar si mañana este tiempo, que no nos ayuda, mejora. Dormiremos una noche más, acompañados de los latigazos catabáticos.