Conversamos con Fernando González Sitges, zoólogo y documentalista, sobre el propósito del viaje en el marco de “Exlorãre en casa”
“Necesito el sentido de lo salvaje”
“Necesitamos volver a lo salvaje. Necesitamos saber que hay lugares en los que, aunque no vayas a ir nunca, no todo esté medido ni cortado por el mismo patrón. No quiere decir que haya que ser un antisocial; en esos lugares es donde nace la esencia del ser humano. Es donde se desarrolla la imaginación, donde nuestro espíritu se hace fuerte y donde crece la esperanza de que nada está controlado, que todo puede cambiar e ir a mejor.”
Los propósitos de un viaje son infinitos. Cuando preparas un viaje encuentras sacos, toneladas de objetivos – dice Fernando González Sitges- y reconoce que lo más delicioso de un viaje es el arranque, la preparación: cuando te empiezan a llegar mapas, libros… e infinitos objetivos; y todos ellos positivos. Después, en el viaje, llegan los imprevistos, todo aquello que no cabe en lo organizado y entonces es cuando la experiencia alcanza la categoría de maravillosa.
Conversar con Fernando es un curso intensivo, cada frase, cada reflexión, cada comentario son titulares a escribir en tu cuaderno de apuntes. Vivimos en la época de la inmediatez – indica – en la que cualquier cosa, por insignificante que sea, la compartimos en redes, pero cuando llegas a un lugar especial eso se queda para uno mismo: los olores, los sonidos, las sensaciones de ese momento están ahí solo para ti y para quien esté contigo. Es muy difícil explicar el olor de la selva si no has estado ahí – reconoce – ¿cómo compartir eso en Instagram?
La curiosidad
Este zoólogo y documentalista de profesión y vocación comenzó a viajar siendo niño a través de las aventuras 
que vivía en los libros. Lo siguiente fue preguntarse cómo sería realmente estar delante de una manada de elefantes y ése fue el motor que le hizo moverse por el mundo: la naturaleza. El mundo es fantástico – afirma- y la literatura se queda corta ante las experiencias de un viaje en el que tú eres el protagonista y el responsable del guion.
Cuando crees que no necesitas nada nuevo porque te ves muy cómodo en casa, se van cerrando las ventanas de la curiosidad y eso es el fin. Hay un mundo inexplorado por descubrir: “el 70% del planeta es océano y el 80% de esos océanos son desconocidos. Ahí abajo no ha pisado nadie” dice este zoólogo que buscó el mítico kraken en sus fondos.
En el momento en que dejamos de buscar nos morimos. González Sitges señala que en el momento en el que perdemos la sorpresa es donde aparecen los viajes porque en ellos todo es nuevo; el ansia de conocimiento y la curiosidad es lo que nos invita a viajar. Fernando evoca los viajes de hace un siglo donde todo tenía otras dimensiones, sobre todo, el tiempo. Un viaje podía durar cuatro meses y entonces sí se podía hacer un buen cuaderno de viajes.
-¿Para cuándo un taller de cuadernos de viaje, Fernando? Le lanzamos la propuesta y él la acepta y la matiza…
-“pero en el campo”.
La cita, imprescindible. Los detalles, en la SGE.