Jesús Garzón, primer Premio Investigación de la SGE y defensor de vías pecuarias, pastoreo y trashumancia.
Madrid, febrero 2024. El pasado mes de diciembre (2023) nos dejó Jesús Garzón, conocido como “Suso el de las trashumancias”, Premio Investigación 1998 de la SGE por su impulso en la recuperación de la trashumancia y referente imprescindible del movimiento conservacionista de nuestro país. La SGE le entregaba, allá por noviembre de 1999, este reconocimiento por el Programa 2001 para la recuperación de las cañadas reales.
EN DEFENSA DE LA TRASHUMANCIA
Ha querido el destino que también en diciembre de 2023 la trashumancia haya sido declarada por la UNESCO Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en España (ya tenía este reconocimiento en otros nueve países como Grecia e Italia). Son 125.000 km de vías pecuarias las que recorren la península y las islas haciendo evidente que es una tradición que se extiende por todo nuestro territorio. Su nacimiento data del siglo XIII, bajo el auspicio de Alfonso X el Sabio, por la necesidad de mover los rebaños en busca de alimento. Las grandes diferencias climáticas entre el norte y el sur de la península ibérica propiciaron la creación de una red de nueve cañadas reales, un sistema de anchísimas sendas pensadas para conectar los pastos de invierno de Extremadura y Andalucía con las frescas regiones del norte, perfectas para estacionar los rebaños en verano.
Fiesta de la Trashumancia en Madrid.
© Carlos Teixidor Cadenas
Jesús Garzón realizando la trashumancia por las calles de Madrid.
© Ecologistas en Acción
Garzón defendía que la trashumancia es una actividad que ha moldeado el paisaje de la península ibérica y una infraestructura única en el mundo. Afirmaba asimismo que era un arma estratégica para mitigar el cambio climático y adaptarnos a los impactos que están por llegar, para producir alimentos de calidad reduciendo el consumo de agua, piensos y energía, y para combatir el abandono rural y el desmoronamiento de la cultura tradicional. Suso Garzón consiguió que normalizáramos la imagen de las ovejas tomando el Paseo de la Castellana cada otoño para recordar a los urbanitas que antes que una gran avenida fue una cañada real.
Pero Jesús Garzón está considerado también el padre del Parque Nacional de Monfragüe, por el que luchó y de cuyo consejo fue fundador y presidente. Su labor en defensa de la naturaleza le llevó a la política, entre 1984 y 1987, siendo director general de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura. Autor de cientos de publicaciones científicas, sus primeros trabajos de investigación estuvieron dedicados a la cigüeña negra, el urogallo y la fauna del área metropolitana de Madrid.
Fue también colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente. Participó en la elaboración del censo del lobo y de distintos programas de protección de especies, así como en la reintroducción de buitres negros, leonados y alimoches y en la prevención de daños por zorros, lobos y osos a la ganadería extensiva con la distribución gratuita a los ganaderos de perros mastines.