Hatra, la perla de Irak

*La posibilidad de viajar en el tiempo siempre me ha fascinado. Relatos como el de H.G.Wells “La Máquina del Tiempo” o “Un yanqui en la corte del Rey Arturo” de Mark Twain, entre otros, me han hecho soñar durante mi infancia con vivir sus tentadoras aventuras.

*Mesopotamia, Tigris, Éufrates… pronunciar estos fascinantes lugares aviva mis sueños infantiles. Nos entusiasmamos pisando el suelo de aquellos personajes que, a lo largo de milenios, han protagonizado increíbles episodios históricos marcando el devenir de la humanidad. Son lugares que para nosotros nutren a la HISTORIA en mayúscula.

*Hatra es la joya de la corona arqueológica de Irak. La siniestra sombra del ISIS (Daesh) planea sobre este remoto emplazamiento, que floreció en medio del desierto gracias al comercio caravanero. Si viajásemos en el tiempo este episodio tendría que ser borrado de un plumazo. Los sanguinarios terroristas la eligieron, tras devastarla, como campo de entrenamiento militar entre 2015 y 2017. Rostros esculpidos mutilados salvajemente y cicatrices de proyectiles en los muros son los taciturnos testigos de ese ultraje.

*Los controles militares para acceder no nos dejan avanzar si no portamos el permiso de visita que es obligatorio adquirir ¡a 115 km de Hadra!, en Mosul, en el Departamento de Arqueología.

Llegamos a Hatra, un viaje al pasado de Irak

Llegamos a Hatra, un viaje al pasado de Irak                                             

Hatra, templos para… ¡colosos!

Hatra, caravanera, santa y artística

*Este importante Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, erigida entre los s. III  y II a.C., fue la capital del poderoso Imperio Parto. Una gran muralla circular custodiaba trece templos sagrados para adorar a su principal dios, Shamash, el dios sol. Sus bóvedas y columnas de más de 30 m de altura son para nosotros como traspasar por el arco del tiempo a otra dimensión. Sus bajorrelieves con figuras de seres mitológicos, tritones y grifos, inscripciones en arameo que revelan la clave de la vida y creencias de la época… Estamos muy emocionados y visitarlo en solitario aún aviva más el aura de misterio.

*El arqueólogo Mahmood, comparte nuestro entusiasmo mientras nos explica los detalles. Los tres nos hemos quedado sin beber ni comer durante horas pero hemos saciado algo más importante: nuestra sed y hambre de conocimientos y… nuestra infantil fantasía de viajar en el tiempo.

Inscripciones en arameo-atreo                       

Hatra, la perla de Irak

El apocalipsis del ISIS, también paso por Hatra

Galería