LANZAROTE, LA ISLA DE LOS VOLCANES.
Visitar la Isla de Lanzarote es como asomarse al interior de nuestro planeta. Sus volcanes nos recuerdan el planeta en el que realidad vivimos: sustentado en un delgado estrato sólido, que flota sobre un mundo de magma.
La SGE propone para 2020 un viaje a esta isla, localizada en el extremo oriental del archipiélago canario, frente a las costas noroccidentales de África, donde las estructuras volcánicas están preservadas de una manera excepcional.
Lanzarote es diferente, no solo comparada con las otras islas canarias, sino con cualquier otro lugar de este planeta. Las recientes erupciones de los S XVIII y XIX son responsables -junto con la escasa erosión y precipitaciones- de un magnífico relieve volcánico compuesto por numerosos cráteres de gran belleza, y extensas áreas cubiertas por coladas de lava, cenizas y piroclastos. No obstante, el ser humano ha sabido vivir en este paisaje casi lunar, gracias a su esfuerzo por cultivar la tierra, como sucede en las plantaciones de la Geria, donde las viñas crecen en los depósitos volcánicos. Sin olvidar el trabajo del arquitecto y artista canario, César Manrique, que supo ver y aprovechar la belleza de esta isla cuando permanecía en el olvido.